“Controlando las percepciones del oponente”
Parte 2: “Propiocepción (Percepción de la Posición del Cuerpo)”.
En la Parte 1 de este artículo sobre Shinnenjutsu, hablamos de la Percepción Visual, y cómo controlar la percepción visual del oponente, es decir, controlar su mente.
Ahora echaremos un vistazo a la parte realmente divertida, Propiocepción, y cómo puedes tomar control de la mente de otra persona a través del tacto. Este área es comentada a menudo en la Bujinkan (palabras kinestésicas como; relajarse, no usar la fuerza, etc.), pero entender el mecanismo para controlar las percepciones de otra persona mediante el tacto, y como aplicarlo, son otra historia completamente.
Dejadme dejar claro que esto no es en ningún caso la respuesta “definitiva” y completa para la “magia” que Hatsumi Sensei y algunos Shihan demuestran, pero sí que avanza bastante dándote un conjunto de herramientas que te permitirán ver y comprender, así como llevar a cabo, el tipo de cosas que Sensei hace con su Budô Taijutsu.
Antes de adentrarnos en ello, necesitamos entender un poco más acerca de qué es la Propiocepción.
El Sentido Propioceptivo se refiere a la entrada de información mediante el movimiento sensorial que nos informa sobre el movimiento y la posición corporal. Esto es la posición del cuerpo relativa a sí mismo (ej. los brazos en relación con el torso), y el cuerpo relativo a cualquier cosa que esté tocando (el suelo, una silla, otra persona, etc.). Es uno de los “sentidos profundos” y podría ser considerado como “el sentido de posición”.
Sus “receptores” (llamados propioceptores) están ubicados en nuestros músculos, articulaciones, ligamentos, tendones, y tejidos conectivos. La piel, ya sea estirada o comprimida, también juega un papel muy importante en la consciencia del posicionamiento.
Si este sentido propioceptivo no está recibiendo o interpretando correctamente la entrada de información dentro de los músculos, articulaciones, etc., entonces nos referimos a esto como Disfunción Propioceptiva.
Sin los mensajes apropiados sobre si los músculos o la piel están siendo estirados, o si las articulaciones se están doblando o estirando, y que cantidad de todo esto está ocurriendo, las personas tendremos los siguientes signos “clínicos” de Disfunción Propioceptiva (una enfermedad real):
- Dificultad de “planificación motora”, ej. Conceptualizar y darse cuenta de qué tiene que hacer cada parte del cuerpo para poder moverse de una manera determinada o completar alguna tarea (lo que para nosotros es un sentido inconsciente, se convierte en activo, consciente, y frustrante sentido para ellos)
- Dificultad ejecutando esos movimientos planeados: ej. “control motriz” (el cerebro puede que sepa qué hacer, pero no sabe cómo hacer que su cuerpo lo haga)
- Dificultad para “cuantificar el movimiento”; saber cuánta presión se necesita para completar una tarea (ej. sujetar un vaso de agua, agarrar y escribir con un lápiz, pasar la página de un libro, golpear una pelota de golf dentro del agujero, etc.)
- Dificultad para la “estabilidad de la postura”; ej. la habilidad para conseguir y mantener una respuesta y postura muscular, dándote un sentido de seguridad y estabilidad durante el movimiento
Como puedes ver en todo lo comentado anteriormente, este sentido de Propiocepción es un componente clave y enormemente importante para nosotros en el estudio del Budô Taijutsu. Aunque no estemos creando un caso permanente de Disfunción Propioceptiva, los efectos inmediatos son los mismos y por lo tanto útiles para nuestro propósito.
Relacionado con la Disfunción Propioceptiva tenemos la idea de Disonancia Propioceptiva.
Disonancia significa desacuerdo o incongruencia, la idea de Disonancia Propioceptiva se refiere a la situación en la cual el sentido propioceptivo está recibiendo dos o más mensajes diferentes y opuestos (compitiendo), causando que la mente envíe información defectuosa de vuelta hacia el cuerpo.
(Es importante resaltar que la respuesta propioceptiva ocurre a nivel del sistema nervioso, el cual tiene un tiempo de respuesta muy rápido, no el mucho más lento y de mayor orden, proceso de pensamiento consciente al que típicamente asociamos con el término “mente”).
Ahora que tenemos una definición de la Propiocepción y de por qué podríamos querer causar Disfunción y Disonancia Propioceptiva, echemos un vistazo a algunas formas en que podemos implementarlas a nuestro Taijutsu.
Disfunción Propioceptiva
Primero, los receptores en las articulaciones envían dos piezas importantes de información a la mente:
- Amplitud del movimiento
- Velocidad del movimiento
Amplitud se refiere a la distancia que se mueve la articulación, mientras que velocidad, por supuesto, se refiere a cómo de rápido se mueve esa articulación.
Amplitud
Cuando una articulación (brazo, pierna, cabeza, etc.) es movida hasta un límite, tus propioceptores envían una señal alertando a tu mente de que necesita hacer un reajuste. Si un atacante te agarra en kumiuchi y tu respuesta es empujar y tirar sobre sus brazos, su cuerpo se ajustará automáticamente con el fin de mantener una posición equilibrada y fuerte.
Puedes usar esta reacción de dos maneras.
Método 1:
La primera es no mover los brazos (relativos al torso del oponente) dejándolos quitos pero moviendo tu cuerpo alrededor de ellos. Aquí es donde entra en juego el principio de “mueve tu cuerpo alrededor del arma, no el arma alrededor del cuerpo” (sabaki gata).
(No te dejes engañar por la palabra “arma”, en el caso del omote gyaku, el “arma” es la muñeca, o la zona que estás usando para controlar al atacante. Como si fuera el pivote y tu cuerpo la palanca)
En el Bujinkan Zero Point Dôjô aquí en Japón, usamos la idea de contacto inicial (el momento en el que “comienzan a agarrarte” el atacante o viceversa) para transmitir el principio de sabaki gata. En el momento en que tú y el atacante os “engancháis”, habrá una “forma” en la que los dos cuerpos estén conectados (fíjate en las partes donde están conectados, luego mira los ángulos entre sus brazos y su torso- ésta es la “forma”).
Para que puedas crear la Disfunción Propioceptiva, necesitas dejar esa “forma” tal como está mientras que te mueves con los pies, hasta el punto en que tomas su equilibrio, pero no tanto como para que tenga que dar un paso o se caiga. Si le mueves más allá de ese punto, su sentido del equilibrio se encenderá y entonces recobrará su estructura.
(Esto puede ser algo difícil al principio, pero saldrá fácilmente con un poco de práctica.)
Lo importante aquí es lo siguiente: tú oponente creerá que su estructura y su equilibrio están bien, porque has mantenido la amplitud del movimiento al mínimo.
La otra parte importante relacionado con esto es la velocidad.
Velocidad
Aquí cuando hablamos de velocidad, es siempre relativo a la velocidad del atacante. Esencialmente querrás mimetizarte con el timing de su movimiento. En el ejemplo anterior sobre kumiuchi, si el atacante pone presión en sus brazos y te aprisiona, deberás moverte con el timing de esa presión. Esto suena muy evidente, pero la mayoría de nosotros querrá moverse más rápido en un intento de “vencerle por sorpresa” por decirlo así. Esto es contraproducente para el objetivo del control mental.
Probablemente te sea familiar el consejo sobre ir despacio cuando practicas tu Taijutsu. Aparte de la necesidad de adquisición de habilidad (que debes hacer despacio al principio, luego gradualmente incrementando la velocidad para una máxima integración), hay otra razón para moverse despacio: que engaña el sentido propioceptivo del oponente (shinnenjutsu).
Para demostrar esto; agarra a alguien por el brazo y dale un tirón, verás cómo automáticamente se ajusta para acomodarse y se tensa. Esto se llama reflejo de extensión [ ], es una herramienta propioceptiva y su propósito es prevenir daños en el músculo, esta reacción (la tensión de los músculos cercanos a la parte del cuerpo siendo tirada) se amplifica en situaciones de alto estrés. Lo que también significa que estarás ayudando a tu oponente a generar más fuerza contra ti mismo. A menos que tengas la confianza de ser más fuerte que cualquier persona que te puedas encontrar, trata de evitar esto.
Al igual que controlando la percepción visual del oponente, conviene moverse primero, pero muévete despacio. Cuando sientas que te estás moviendo suficientemente despacio, trata de moverte aún más despacio. En la práctica, llévalo a lo más despacio que puedas y seguir manteniendo una buena estructura.
El segundo método para jugar es;
Método 2
Mover intencionalmente los brazos del atacante para provocar la respuesta propioceptiva que necesitas de él.
De nuevo, desde kumiuchi, esta vez empujas con tu brazo derecho en su brazo izquierdo como si fueras a realizar Musha Dori, al mismo tiempo girando tu cuerpo y deslizando sutilmente tu hombro izquierdo sobre su brazo derecho. A esto reacciona al movimiento de su brazo izquierdo (respuesta propioceptiva) tensando su cuerpo en un intento de prevenir que realices el Musha Dori, te desplazas recto hacia abajo, atrapando su brazo derecho con tu brazo izquierdo en el Musha Dori “real” Este es un ejemplo más obvio de shinnenjutsu.
Disonancia Propioceptiva
Al implementar la Disfunción Propioceptiva buscamos enviar señales incompletas o incorrectas al sentido propioceptivo. De hecho, controlando la mente de nuestro atacante a través de la decepción. Ahora, con la Disonancia Propioceptiva, tomaremos el control de la mente del oponente (sentido propioceptivo) mediante la confusión (enviando demasiada o contradictoria información).
Para lograr esto con éxito hay varios principios del movimiento que necesitas implementar:
- Muchos Puntos de Contacto -“envuelve” tu cuerpo al suyo.
- Empuja – No tires.
- Usa movimientos tridimensionales (espirales o arcos).
- Muévete hacia el espacio que necesite ocupar después.
- “Deslízate” por el contorno de su cuerpo.
Muchos Puntos de Contacto:
En Bujinkan muchas veces nos aconsejan a tener “tantos puntos de contacto como sea posible”. La visión general es porque nos permite “controlar” (mediante la sensación) lo que está haciendo el oponente. Esto es cierto, pero hay otro motivo por el que es útil, porque todos esos puntos de contacto están enviando información al sentido propioceptivo del oponente (él también está sintiendo), lo que significa que podemos enviar la información que queremos enviar, creando Disonancia Propioceptiva (control mental).
Uso el término “envolver” (cómo cuando usas el film transparente para cubrir los alimentos y guardarlos en la nevera), porque, cuando envuelves con este plástico toma la forma del alimento, pero realmente no los mueve!
Gracias a estos puntos de contacto, puedes aplicar presión con todo el cuerpo, (rodillas, codos, cadera, etc.) no sólo con las manos. Esto significa que la mente de tu oponente está ocupada tratando de llevar la pista de todas las fuentes de información que llega, mucha más de la que tendría que manejar en estado normal. Como estás “cubriendo” el cuerpo de tu oponente, puedes aplicar presión específica a través de su estructura.
(Más adelante cubrimos el Cómo aplicar esta presión)
Empuja, No Tires:
Esta idea es un poco más difícil de comunicar en términos de lo que se supone como “empujar y tirar”. Generalmente, la fuerza de tu presión debería alejarse de tu cuerpo (empujar), no ir de vuelta hacia tu cuerpo (tirar). El movimiento de fuerza cuando haces flexiones es, por supuesto, un empuje; el movimiento de tus manos al aplaudir es de tirar, porque si tus manos no se detuvieran entre ellas continuarían hasta que tocaran el cuerpo.
Cuando estás tocando al oponente, está dependiendo de ti para el intercambio propioceptivo que le permita mantener el equilibrio y la postura -de hecho, estás sosteniéndolo. El acto de empujar elimina este apoyo. Tirar hace lo contrario; al tirar, él se mueve hacia tu centro, lo que le da una mayor cantidad de información válida que su sentido propioceptivo aprovechará.
Usa Movimientos Tridimensionales (Espirales o Arcos):
La Disonancia Propioceptiva ocurre por recibir demasiada información o contradictoria. Por lo tanto, nos conviene usar movimientos más complejos (3D), en lugar de movimientos menos complejos (2D).
Si empujas el hombro de tu oponente hacia atrás estás enviando cierta información a su sentido propioceptivo, si empujas su hombro en un arco hacia su línea débil (90 grados hacia la línea que pasa por sus talones), estás enviando muchísima más información a su sentido propioceptivo. Ahora, si empujas su cadera en un arco de 90 grados hacia el arco en que su hombro se está moviendo, vas a sobrecargar su sentido propioceptivo, una vez más, tomando control de su mente.
Muévete Hacia el Espacio que Necesite Ocupar Después:
Mientras te mueves alrededor de tu oponente, manteniendo al máximo el contacto, empujando su cuerpo, no tirando, tendrás que moverte hacia el espacio que el necesitará despues.
Hatsumi Sensei siempre está diciendo “tsugi tsugi” el siguiente el siguiente, refiriéndose a: estar atentos a dónde tu oponente tendrá que ir después con el fin de atacarte con éxito, entonces toma ese espacio (controlar el kûkan).
Por ejemplo; si empujas a alguien hacia su cuadrante trasero izquierdo, primero tendrás que moverte alrededor de su cuerpo hacia ese espacio! En este punto, el estará ligeramente apoyado hacia ti, ya que aún estás “cubriéndole” como envolviéndolo, lo que significa que están dependiendo de ti para su equilibrio y sentido de la posición. Desde aquí es bastante fácil “quitarlo del medio” ya que no será capaz de responder apropiadamente a cualquier cosa que hagas.
(Como podréis imaginar, para poder hacer esto correctamente, tendrás que estar muy cerca del oponente. En el entrenamiento, llamo a esto mantenerle en tu “zona de abrazos”, el lugar donde estaría alguien si fueras a abrazarlo. Esto significará menos distancia a cubrir.)
Deslízate por el Contorno de su Cuerpo:
Hatsumi Sensei hace esto bastante a menudo, en vez de moverse a empujones, gentilmente “desliza” su pierna o su brazo por el cuerpo de su oponente. Hay una reacción de respuesta al tacto, causando que el cuerpo se aleje del contacto. Si empujas con demasiada fuerza el efecto se neutraliza.
Por ejemplo; si colocas suavemente tu mano izquierda sobre el hombro derecho del compañero, luego la deslizas por su espalda hacia el hombro opuesto, notarás que habrá cambiado su equilibrio hacia el frente en su pie izquierdo.
(Evidentemente si el compañero sabe lo que harás de antemano se resistirá y se moverá de forma distinta)
Ya que este cambio es un cambio sutil, es más útil cuando el oponente está en movimiento.
Para poder apreciar esto realmente (y todos los factores de Disonancia Propioceptiva), se deben sentir en persona. Cualquiera que haya entrenado con Hatsumi Sensei le ha escuchado decirlo. Otra cosa que Sensei suele decir, en cada clase, es que juguemos con estas ideas.
Este breve artículo realmente no puede hacer justicia al tema en cuestión. Animo todo el que quiera a investigar el rol que la Propiocepción juega en nuestro arte marcial y a venir a Japón y estudiarlo en persona.
Rob Renner
Septiembre 2007